Será la siguiente semana cuando la Suprema Corte
de Justicia de la
Nación discuta el tema de las tarifas
de interconexión.
Como es del dominio público, la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN)
discutirá el 22 de este mes sobre telecomunicaciones, haciendo énfasis en las
tarifas de interconexión telefónica en nuestro país.
El centro del debate sigue siendo si México debe o no ajustar su modelo de
operación, ajustándose a las tendencias internacionales en las que las tarifas
de interconexión se definen a costo o si se mantiene el sistema o modelo de
“externalidades”, en el que se agrega un sobreprecio a la tarifa para incentivar
la expansión de las redes móviles.
En este sentido, le comento que a pesar de ser los inventores de este último
sistema, la Oftel británica ya desechó el sistema de externalidades y asumió una
política pública que tiende a tarifas a costo. Esta decisión fue tomada en esa
nación debido a que una vez que la red alcanza cierto tamaño sólo quedan las
distorsiones del mercado que esta medida genera.
Esta tendencia ha sido seguida por otros países como Bélgica y casi la
totalidad de la Unión Europea y, seguramente, será tomada en cuenta por los
ministros de la Corte en sus proyectos que serán discutidos la próxima
semana.
En este contexto, resulta muy oportuna la investigación realizada por el
profesor-investigador de Escuela de Graduados en Administración Pública y
Política Pública del ITESM, campus Monterrey, Lester García, que documenta las
razones que han utilizado los reguladores y los generadores de políticas
públicas para adoptar esquemas de sobreprecio y de esta manera incentivar el
crecimiento de la red. También observa que cuando las redes móviles llegan a
cierto nivel de saturación, el sobreprecio que en su momento sirvió como
incentivo carece de justificación.
Éste, concluye el autor, es el caso de México, sobre todo si se considera que
las altas tarifas de terminación han generado distorsiones en el mercado, como
el hecho de que sea más barato hablar de celular a celular que utilizar una
línea fija. Recordemos, por ejemplo, que Telcel ha ofrecido a sus clientes de
prepago precios similares o por abajo (1 peso el minuto) que lo que ha llegado a
cobrar a las telefónicas donde terminan las llamadas.
En el 2006, se estableció El que Llama Paga por parte de la Comisión Federal
de Telecomunicaciones (Cofetel), que incluye un sobreprecio, el cual ha sido muy
polémico y ha estado en el centro de diversos procesos legales y
regulatorios.
La justificación del sobreprecio fue expandir la red en beneficio de los
usuarios, “la pregunta relevante es, dice el autor del estudio, si ante las
condiciones actuales del mercado mexicano dicho subsidio tiene justificación o
si esta política regulatoria incluso debería revisarse como ya ha ocurrido en
otros casos, particularmente en el Reino Unido. El esquema de reducción
propuesto por las autoridades llegó a su fin en el 2011 y el regulador mexicano
ha definido reducciones tarifarias que, aunque aún se encuentran en litigio,
parecen reflejar un abandono de la anterior política de externalidad de
red”.
El sector de las telecomunicaciones en México ocupa el undécimo lugar en
tamaño entre los países miembros de la OCDE, con ingresos de alrededor de 26,600
millones de dólares en el 2011.
En el sector de telefonía móvil, México está en quinto lugar en número total
de suscriptores, pero en suscriptores por cada 100 habitantes está en el sitio
33 de los 34 miembros de la OCDE.
Sobreprecio, sin sustentos
De acuerdo con esta lectura, hoy no existen argumentos para sostener un
sobreprecio en las tarifas de interconexión. Veremos qué dicen los ministros de
la Corte, en específico de la resolución de los juicios de amparo en revisión
identificados con los números 426/2010 y 318/2011 bajo las ponencias de los
ministros que dejarán la SCJN en noviembre, Guillermo Ortiz Mayagotia y Salvador
Aguirre Anguiano.
Y por cierto que, por parte de la Cofetel, el comisionado Gonzalo Martínez
Pous anda haciendo el trabajo a ras de tierra y ha estado visitando ya a cada
uno de los 11 ministros para defender el punto de vista del órgano
regulador.
Así, lo que está en juego es la interpretación de todo el marco jurídico en
la complicada materia de interconexión y para las empresas telefónicas el monto
de las tarifas que deberán pagar los operadores fijos a los móviles para la
terminación de llamadas en las redes de estos últimos para los años que van del
2005 al 2010.
Fuente http://eleconomista.com.mx
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